lunes, 19 de marzo de 2012

¡No digas eso!

NO SABE, NO QUIERE, NO CONTESTA.




¿Por qué decir una cosa por otra? Si a alguna cosa determinada, la llamo de otra manera, ¿esa cosa dejará de ser lo que es para transmutarse en algo bueno?

No caben dudas de que hay algunos eufemismos que tienen un cierto sentido social, fundamentalmente por cuestiones de pudor, cuyas razones son bastante cuestionables pero este tema no es el punto (ni la coma) de este nuevo artículo.
Parto sin dolor


Referencia tangencial: no conozco el caso de algún bebé que haya nacido vestido; ¿por qué, entonces, la desnudez es tan atroz? Pero ésta sí que es harina de otro costal.


Otros eufemismos, en cambio, son intrínsicamente imbéciles, por la superficialidad e indiscriminación con que se los utiliza.


Villa Miseria
Uno de éstos, ya bastante viejo, es hablar de “la gente humilde” para referirse a la cada vez mayor cantidad de personas pobres, indigentes, desnutridas, que habitan viviendas súper precarias, etc. La humildad no tiene nada que ver con estas cosas que se desean encubrir.


Buenos Aires - Embajada de Francia
Estoy seguro de que la mayoría de las personas en condiciones tan espantosas de vida, son buenas, y también cabe suponer que muchas sean humildes.


Malvón
También cabe suponer que entre las personas de mejor posición social, haya muchas muy buenas y humildes.
Por su parte, el orgullo o la soberbia se dan en cualquier clase social, en cualquier lugar de la Tierra, y en cualquier época de la historia de la Humanidad.


Aparte de lo que acabo de escribir, pienso que es por demás urgente y necesario seguir trabajando para que estas diferencias entre las distintas clases sociales, vayan achicándose lo más rápido posible.


Asimismo, detesto decir “no vidente” en lugar de “ciego”, que no tiene ninguna carga peyorativa.
Esto es muy curioso: al sordo, no se le dice "no oyente", ni al mudo "no parlante".
Es posible pensar que, de las tres cosas, la ceguera es la peor, pero no tiene nada de ignominioso, espantoso, infamante, culpable o lo que sea, como para que haya que disimularla como una de las cosas más degradantes del ser humano.

O “pueblo originario”, como si “aborigen” significara otra cosa. Ésta es una imbecilidad tan gigantesca que no deja de producirme urticaria cada vez que la escucho, es decir, me broto todo. Me espanta la magnitud de esta estupidez. ¿Por qué un aborigen va a sentirse discriminado cuando lo llaman como tal? ¿Es que acaso no tiene acceso a un diccionario? Contrariamente, parece que los de las clases dirigentes NUNCA oyeron hablar de este libro tan lleno de palabras ordenadas alfabéticamente. ¿Para qué servirá?


Como a mí me parece, aunque más no sea remotamente, que tiene cierta utilidad, transcribo la definición de la parte seria de la imbecilidad que nos ocupa.
aborigen.


1. adj. Originario del suelo en que vive. Tribu, animal, planta aborigen.
2. adj. Se dice del primitivo morador de un país, por contraposición a los establecidos posteriormente en él. U. m. c. s. pl.

¿ENTONCES?


Y así se suceden distintas maneras de hablar que carecen de sentido. Hasta cierto punto, no les hacen mal a nadie. No obstante, si por tanto "disimular" creo que las cosas cambian, entonces estoy frito.

Por ejemplo, decir “ojalá que no pase lo peor” por no decir “ojalá que no se muera”, me parece algo tonto. O decir “Dios quiera que no tenga algo malo”, como si pronunciar la palabra “cáncer” fuera de mal agüero.
En cambio, cuando estás enfermo, estás por ir al médico y alguien  te dice "ojalá que no tengas nada", ese alguien está cometiendo un grave error. Si te sentís mal, algo tenés. Lo acertado es decir, "ojalá que el médico descubra lo que te pasa y que no sea algo grave" o palabras al mismo efecto.


La ocurrente clasificación “desprolijidad”, de hace algunos años, no sólo no existe como palabra, sino que disimulaba diferentes clases de delitos que comenten funcionarios y políticos. Fue fenomenal. Ahora, lamentablemente ha caído en desuso, y se habla sin ambigüedades de "corrupción". ¿Será que las desprolijidades han crecido a galope tendido desparramándose por doquier?


No puedo imaginar la cantidad de amor que habría en este planeta devastado, si realmente cada vez que dos personas “hacen el amor”, éste quedara acumulándose en algún lado. Opino que se pueden tener relaciones sexuales sin una pizca de amor. ¿No sería más sencillo usar el elegante verbo “copular”?


Para terminar, paso a una serie de eufemismos que no sólo me ponen la piel de gallina, sino que me parecen atroces.


LAS CAPACIDADES ESPECIALES


Opino que hablar de “capacidades especiales” es una afrenta despiadada para los discapacitados a cualquier nivel, físico o mental. Sería como decir de mí que no soy petiso, sino que tengo “una altura especial”. Recontra tarado, por decir algo modesto.


La afrenta consiste en no aceptar sin vueltas la diversidad, y entonces retorcer la realidad para que los supuestamente afectados no se sientan mal. Insisto: cambiar la forma de hablar, ¿hace desaparecer la discapacidad? ¡Claro que no! Si yo fuera discapacitado, me haría sentir peor al comprender que no quieren aceptarme tal como soy.


Una persona discapacitada tiene que vivir lo mejor que pueda, lo cual, en la mayoría de los casos, implica una gran dosis de esfuerzo personal y familiar. ¿Deberán además afrontar la enorme discriminación con que la sociedad los fustiga por tratar de hacer de cuenta de que "acá no pasa nada"?


E insisten en integrarlos sin misericordia alguna a la vida de la gente normal (es un decir, nadie es normal) como si pudiesen desempeñarse como se desempeñan sus supuestos "iguales".


¿Se puede llegar a tenerle tanto miedo al que, en efecto, es distinto?


DE VERDAD


Hay personas que, verdaderamente, han gozado de capacidades especiales. Por nombrar algunas: Mozart, la Reina Victoria, Leonardo Da Vinci, Isadora Duncan, Graham Bell, la Madre Teresa, Albert Einstein, Madame Curie, Julio César, Golda Meir, y muchas más.


Madame Curie


Mozart
Albert Einstein






Madre Teresa











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lunes, 12 de marzo de 2012

Amigos son los amigos

Este artículo, entrada y comentario, es la natural continuación de aquel otro, ya publicado bajo el honroso título de "Invierno en verano", el 23 de Enero del corriente año. El video comentado en ese momento era una pauta publicitaria del afamado whisky Old Smuggler.

Si no tienen ganas de retroceder para releerla, de a poco, como con cuenta gotas, les voy diciendo que trataba de distinguir cualquier relación interpersonal como algo diferente de la amistad verdadera.

No obstante, empero y sin darnos demasiada cuenta, en las redes sociales se habla de los amigos como si estos endebles contactos fueran lazos fortalecidos con el paso de los años.

La propaganda del Viejo Contrabandista (Old Smuggler), que sabe más por viejo que por contrabandista, da algunos criterios elementales a partir de los cuales las amistades irreales se evanescen como polvo en el viento, tal como lo dije hará cosa de dos o tres artículos atrás, en relación a cualquier otra cosa.

Desde hace un tiempo, cuando una vez más se me prendió la bendita lamparita de bajo consumo, vengo afirmando que la verdadera amistad... ¡casi me olvido! ¡recuerden que la falsa amistad también es amistad!... tiene naturalmente tres soportes, pilares, pilotes, pilates, a saber a:

1) Libertad.
2) Respeto.
3) Amor.

A diferencia de otras relaciones interpersonales, no hay ninguna obligación para ser amigos. Para trabajar, en cambio y por ejemplo, hay condicionamientos previos; como mínimo, la necesidad de ganar dinero para seguir vivito y coleando.

En la amistad, en cambio, si hay condicionamientos previos, opino que se puede decir con rotundidad que eso es cualquier cosa menos amistad. Será una relación sado-masoquista, de dependencia, o lo que sea, pero no amistad.

Ya que estoy, copio la definición del Dic. de la Leng. Castell.:


amistad.

(Del lat. *amicĭtas, -ātispor amicitĭa, amistad).

1. f. Afecto personal, puro y desinteresado, compartido con otra persona, que nace y se fortalece con el trato.


Segundo pilar: respeto. Si entre los que se han convertido en amigos no existe un auténtico respeto, esa aparente amistad se dispersa, otra vez, como polvo en el viento.

Ya que me decidí a afirmar, afirmo que, sin respeto, no se puede dar un amor verdadero. Puedo respetar a alguien, y no amarlo; como ser, al gerente del banco. ¡Uy, como lo respeto! ¿Lo amo? ¡Ni ahí!

Por el contrario, no puedo amar a alguien si no lo respeto. Así de simple, así de comprobable en la vida cotidiana, así de difícil de poner en práctica con sinceridad de corazón.

Pancho Ibáñez
Esto puede parecer un cambio abrupto. No obstante, no lo es. Como decía Pancho Ibáñez, hace muchos años atrás en su programa "El Deporte & el Hombre": "Todo tiene que ver con todo". En aquella época me sucedió algo extraño: ese programa me gustaba a pesar de ser deportivo.


Paso a mirar la misma cuestión desde otra perspectiva y a partir de mi propia experiencia. El 4 de Enero del 2008 (no lo recuerdo, sino que es un dato que quedó registrado), abrí una cuenta en YouTube para buscar viejas canciones, imposibles de encontrar en este tiempo presente. Ya que estoy, les comento que encontré cosas muy buenas.

Hace unos meses, me di cuenta de que podía participar en una especie de foro, levemente diferente a los otros foros que he visto, escribiendo comentarios debajo de los videos.

Aquí, entonces, se conversa fundamentalmente sobre imágenes, compaginación, música, etc., de los tantos videos subidos y avenidos.

¡Qué amigo más verdadero...!
¡Qué duda cabe, YouTube también habla de "amigos" a mansalva"! Amigos, contactos, suscriptores, y demás, y demenos.

Como ya dije, esto me enferma. Me resulta reclaro, asimismo, que hay algunos que se desesperan por tener amigos, seguidores, admiradores, bufones y esto y aquello. Me crece una pregunta elemental: ¿para qué?

No alcanzo a imaginar cómo pueden creer que sus amigos son realmente esto que afirman. En fin.

But, sin embargo, nevertheless y empero, resulta que fui descubriendo a algunas personas con las que coincidía. De a poco, y con mis artimañas de escribir tonterías, fui conformando un vínculo especial, pero real.

Comencé con Steffi (alemana) quien, al principio, no entendía ni medio pepino lo que le decía. Es claro, porque escribo como si estuviera hablando en serio, y en ningún momento doy una mínima pista de que es en broma; ni siquiera pongo un simple "ja", o "ha!" (la forma de escribirlo en inglés).

Cuando Steffi se dio cuenta, le dimos rienda suelta y resuelta a nuestras imaginaciones disparatadas y, a partir de tanta cosa absurda, hemos estado divirtiéndonos a lo bestia.

De a poco, se integraron Ralf y Manuel (de Alemania) y Robert (de Puerto Rico). Hemos conformado un grupo de lo más entretenido y usamos, entonces, los canales de "conversación" de YouTube para divertirnos  como locos.

¿Qué tiene que ver la diversión de este grupo con la amistad? Pues precisamente eso. En este grupo específico, aunque no con todos de la misma manera, he sentido cómo se fueron y se van dando lazos de amistad en serio.

Como podrán imaginar, me resulta por demás extraño, pero lo siento de verdad. Y sigo: ¿cómo puedo ser de amigo de alguien a quien nunca vi en mi vida (y súper improbable que lo vea), de quien no tengo idea de nada y así?

Puesto que también usamos nuestros correos personales fuera de YouTube (Hotmail, un decir), quizás estemos experimentando lo que otrora se denominó: "amigo por correspondencia". Paulatinamente, estamos contándonos nuestros gustos, nuestros trabajos, nuestras familias, etc.

Como sea y para terminar, al menos con esta última parte, afirmo que no son amigos virtuales, sino amigos reales.

No se trata de seres etéreos, sino de personas de carne y hueso, con nombre y apellido. Destaco algo que ya dije: somos cinco, tan sólo cinco, no cinco millones trescientos seis mil setecientos dieciocho y medio.

Flor de la Amistad

lunes, 5 de marzo de 2012

Desata el caos (o violencia de la buena, concentrada y duradera)

Para que sea más claro, las nociones básicas como para ir encarando el tema del día de la fecha, en este blog inmemorial, la Real Academia, siempre presente, nos dice de la violencia que es la cualidad de lo que se hace bruscamente, con ímpetu e intensidad extraordinarias. Por otra parte, de caos dice que es confusión o desorden.

Hasta aquí, la cosa no tiene una complejidad intrínseca como para ser estudiada en una aula académica como las que tienen en La Soborna, ¿viste?

Además, ya están muy difundidos los conceptos de diferentes tipos de violencia y de caos. No vale la pena ni enunciarlos.

Se viene la propaganda nomás.


Solamente en 31 segundos se acumulan varias acciones de una violencia inusitada, con diferentes sabores: chocolate, vainilla, menta, cereza, cardumen, polillas, y embutidos de todo tipo.

La canción que acompaña este tierno poema de amor está muy bien elegida. Dice lo siguiente:

Debe ser algo psicológico
quizás con algo muy físico
que me hace sentir
de la manera en que lo hago
cada vez que estoy
en contacto contigo.
Tan sólo déjame poner
las manos sobre ti,
quiero alguien nuevo.
Conmigo el asunto es
siempre psicológico.

Y bué... ¡es lo que hay! Los desodorantes anárquicos son siempre así.

Esta propaganda no es para analizar pues apabulla el sólo verla. Está en el blog para que podamos mirarla prestando atención, con sentido crítico, y comentarla luego con los más jóvenes o los que estén a nuestro alrededor.

Esta pauta publicitaria pasa; aparentemente nadie se da cuenta, o realmente nadie se da cuenta, lo que es mucho peor.

Graba en la hojalata de la conciencia de los que la ven (si llegan a tenerla), el mensaje bien claro de que, en el mundo de hoy, todo vale, sea para lo que sea, y sin que importen las consecuencias.

Los tarados de buena fe son los peores porque, en su ingenuidad desabrida e insulsa, no saben ni a la legua lo que dicen. Afirmarán que es pura exageración de los publicistas e imbecilidades de parecida índole o tenor, soprano, contralto o bajo (no petiso).

Los que no son tarados, sino unos reverendos reventados, hablarán muy bien de cómo han avanzado las técnicas propagandísticas.

Mientras tanto nosotros, en un intermezzo de aguas semipútridas, refunfuñamos por lo violenta que se ha vuelto la sociedad, asintiendo con la cabeza cuando el locutor de la propaganda nos dice que desatemos el caos con este producto para hombre y para mujer. La versión para extraterrestres todavía no se ha fabricado.


Calas de Velorio
Símbolo del Caos



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¿Estaría totalmente fuera de lugar proponer el uso y abuso del blog, ahora que su utilización como foro es más fácil, con el fin de comenzar a conversar entre nosotros para ver cómo despertamos de este letargo que nos aniquila?