miércoles, 17 de agosto de 2011

¡Hola, qué tal! ¿Todo bien?

¡¡ NO, NO y NO !!

¿Cómo podés hacerme semejante pregunta
alevosamente pérfida? ¡Mal rayo te parta!

Está bien, puede ser que saludes de esta manera por costumbre social y no te hayas detenido a pensar todo lo que implica.
De entrada, es una pregunta que condiciona la respuesta. Si me preguntás Todo bien, ¿cómo hago para decirte que no, que no todo está bien?
Además, si me anticipás la respuesta, implica que, de verdad, te importa un pepino y medio, o quizás dos, cómo estoy en concreto.

Desde mí, suponiendo hiperbólica y mayestáticamente que no tenga ningún problema de salú natural en lo físico y en lo anímico, ¿puedo acaso responder Todo bien echando un vistazo alrededor y contemplar, al menos por una fracción de segundo, lo que está sucediendo?

Cada vez que me hacen esta pregunta, doy un respingo, domo un caballo, me arrojo del trapecio, vuelvo a donde estaba... Depende de quién sea el que me la formule, es decir, si tengo confianza suficiente como para responder con la verdad, digo que no está todo bien, añadiendo la explicación que escribí en el párrafo anterior; si es alguien apenas conocido, contestó Sí, ando bastante bien. O sea, de manera espasmódica sorteo y esquivo la respuesta maldita.

Un penoso ejemplo de esto fueron los disturbios que hubo en Diciembre, en Buenos Aires, en el Parque Indoamericano.

La pobreza que nos circunda es cada vez mayor. Tristemente me parece advertir que no hay una propuesta seria que intente solucionar este aspecto tan doloroso de un enorme porcentaje de nuestros conciudadanos. Entre los diversos motivos que cercenan mi esperanza, opino que no se puede resolver problema alguno cuando no se reconoce primero que el mismo existe.

A pesar de todo, son también muchas las cosas buenas que nos rodean.
Los vecinos afectuosos y solidarios, siempre dispuestos a dar una mano.
Los comerciantes honrados que no estafan a su clientela.
Parque de la Independencia
Rosario - Argentina
Aquellos que no transitan las calles como gallinas o gallos un tanto, y un poco  más, desaforados.
Los que, en definitiva, se esfuerzan todos los días por Honrar la Vida, como dice la excelente compositora de tangos contemporánea, doña Eladia Blázquez.

2 comentarios:

  1. Muy bueno y en total acuerdo.
    Me parece que hay que editar el blog, es lo mejor que has escrito hasta ahora.
    Antil

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  2. Todo bien??!!! Lo oigo, sin oir cada 10 minutos, es decir cada vez que me encuentro co n alguien. No me molesto en contestar de verdad: suelo decir "genial", y vos?, y además es cierto.dada la sencillez del conunto vital me va bien, diríamos que muy bien.çHasta otro día

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